Cómo protegerte ante una inspección tributaria
- Fiecco Asesores

- 24 jul
- 3 Min. de lectura
Guía práctica para particulares, autónomos y pymes
En algún momento, cualquier contribuyente —particular, autónomo o empresa— puede recibir una comunicación de la Agencia Tributaria notificando el inicio de una inspección o comprobación limitada. Aunque esto no significa necesariamente que se haya cometido un error o fraude, es fundamental estar preparado para responder con seguridad y eficacia.
En Fiecco Asesores hemos acompañado a decenas de clientes en procedimientos de este tipo. Por eso hoy compartimos una guía clara sobre cómo actuar y prevenir consecuencias negativas en una inspección tributaria.

¿Por qué me puede inspeccionar Hacienda?
La Agencia Tributaria realiza inspecciones por múltiples motivos. Los más frecuentes incluyen:
Declaraciones con errores, incoherencias o ingresos anormalmente bajos.
Comparaciones con la media del sector (modelo 190, 347, ratios).
Información obtenida de bancos, notarios, registros o plataformas digitales (Airbnb, Bizum, Amazon, etc.)
Movimientos sospechosos entre cuentas bancarias o retiradas en efectivo.
Gastos excesivos deducidos en relación con los ingresos.
Declaraciones no presentadas o presentadas fuera de plazo.
Denuncias anónimas o comunicaciones internas entre organismos públicos.
La inspección no siempre se inicia por una infracción, pero cualquier desorden contable o falta de documentación puede empeorar el resultado.
¿Qué tipos de inspección existen?
Comprobación limitada: Se centra en aspectos concretos (una factura, un trimestre, un modelo específico).
Inspección general: Revisión profunda y extensa de varios ejercicios fiscales.
Verificación de datos: Generalmente, un simple cruce de datos que puede solventarse con documentación básica.
En todos los casos, es esencial responder en plazo y con los documentos adecuados.
Documentación que debes tener siempre lista
Ya seas autónomo, particular o empresa, hay documentación clave que debes conservar, preferiblemente ordenada por ejercicio fiscal:
Declaraciones trimestrales y anuales: modelos 100, 130, 303, 390, 347, 190…
Facturas emitidas y recibidas, con justificación del gasto o ingreso.
Libros de registro de ingresos y gastos.
Extractos bancarios y justificantes de movimientos económicos relevantes.
Contratos de alquiler, compraventa, préstamos o prestación de servicios.
Nóminas, seguros sociales (modelos 111, 115, TC1/TC2), retenciones practicadas.
Correos electrónicos y presupuestos que acrediten relaciones comerciales.
Escrituras notariales (hipotecas, ampliaciones de capital, herencias…).
Consejo práctico: digitaliza todo y guarda una copia en la nube con acceso restringido y seguro.
Qué no debes hacer ante una inspección?
No ignores la notificación.Siempre hay un plazo para contestar. Si lo dejas pasar, puedes recibir una sanción automática o un embargo preventivo.
No presentes documentación sin revisar.Enviar documentos incorrectos, desordenados o incompletos puede generar más dudas que soluciones.
No respondas sin asesoramiento. Incluso si “no tienes nada que ocultar”, una mala explicación o una frase mal redactada puede dar lugar a interpretaciones perjudiciales.
No ocultes informacion .La omisión deliberada de datos puede agravar la situación y dar lugar a una infracción grave o muy grave.
¿Qué puede hacer un asesor fiscal por ti?
Contar con un profesional especializado desde el primer momento puede suponer la diferencia entre una sanción y el archivo del expediente. En Fiecco Asesores:
Preparamos y organizamos la documentación requerida.
Analizamos el contenido del requerimiento y el origen del procedimiento.
Respondemos a Hacienda en tu nombre con argumentos jurídicos y fiscales sólidos.
Negociamos reducciones de sanciones o liquidaciones en vía administrativa.
Defendemos tus derechos ante posibles errores o abusos procedimentales.
Además, si la situación lo requiere, interponemos reclamaciones económicas o recursos contencioso-administrativos.
¿Qué ocurre si todo está en orden?
En ese caso, Hacienda emitirá una resolución sin sanción y archivará el expediente. Esto no solo supone tranquilidad, sino que también demuestra una buena planificación fiscal y contabilidad transparente.
Para mantener esa tranquilidad a largo plazo, te recomendamos:
Revisar tu contabilidad periódicamente.
Corregir declaraciones antes de que Hacienda lo detecte.
Hacer auditorías fiscales internas si manejas altos volúmenes de operaciones.
Consultar antes de presentar modelos complejos (como el 720 o el 232).
Conclusión
Nadie está exento de ser inspeccionado, pero sí puedes estar preparado para afrontarlo con garantías. Anticiparse, ordenar la documentación, contar con asesoramiento profesional y actuar con rigor puede evitarte sanciones injustas y quebraderos de cabeza.
En Fiecco Asesores te ayudamos a anticiparte a cualquier inspección. Te guiamos en la
preparación de tu documentación y te defendemos si ya estás siendo inspeccionado. No dejes tu tranquilidad en manos del azar.




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